QUIERO RECONCILIARME
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. Romanos 5:1
¿Te preocupa el futuro? ¿Estás luchando con un asunto personal o espiritual que te hace sentir incertidumbre, ansiedad y miedo? En este sitio encontrarás docenas de temas y preguntas que te ayudarán a comenzar tu viaje hacia la paz.
¿Sientes que Dios te ha estado llamando? ¿Estás preparado para encontrar la paz real y duradera que solo llega a través de una relación con el único Dios verdadero? Da un paso hacia Él hoy.
¿Qué es la paz?
Muchas personas se esfuerzan por conseguir una cosa más que ninguna otra: la paz. Y buscan la paz porque no han encontrado comodidad o libertad en sus vidas que sea duradera. Es como si siempre estuvieran intranquilos. La Biblia describe tres tipos de paz:
1. La paz psicológica, el consuelo interior.
2. La paz relacional, la armonía entre la humanidad.
3. La paz espiritual, que se da entre Dios y el hombre.
La Biblia describe cómo el pecado daña y aniquila estos tres tipos de paz.
Cuando Dios creó al hombre, este vivía en perfecta paz con Dios, consigo mismo y con todo a su alrededor. Sin embargo, esa paz se perdió cuando se rebeló contra Dios. La paz puede restaurarse, pero nosotros no podemos hacerlo solos. La buena noticia es que Dios proporcionó un camino para restaurar la paz.
Jesucristo, el único Hijo de Dios, fue enviado a nuestro mundo para pagar el precio de nuestros pecados. Lo hizo al morir en una cruz en nuestro lugar, y fue su sacrificio el que hizo posible que volviéramos a tener paz: paz dentro de nosotros mismos, paz con los demás y paz con Dios.
Después de morir en la cruz, Jesús volvió a la vida. Eso demostró que Jesús es Dios, pero también dejó claro que Él desea que todos tengamos una paz perfecta. “Porque Cristo es nuestra paz… Él vino y proclamó paz a ustedes que estaban lejos y paz a los que estaban cerca” (Efesios 2:14,17).
Jesús tiene el poder para ayudarnos a vencer todo pecado. Aunque tu situación parezca insalvable, recuerda que no hay nada imposible para Dios. Pero primero debes reconocer tu pecado, arrepentirte y hacer un compromiso con Jesús. Solo entonces podrás tener la paz perfecta.
Jesús dijo: “Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz” (Juan 16:33). Para tener paz, debes conocer a Aquel que puede darla.